Su tour Verde, Blanco y Rojo todo un éxito.
Reportera: Daira Neria – Cámara: Santiago Servín
La Arena CDMX se pintó de los colores de nuestra bandera en una noche que celebró con orgullo la música regional mexicana. El Tour 2025 Verde, Blanco y Rojo Viva México de El Fantasma, Los Dos Carnales y Gerardo Díaz y su Gerarquía ofrecieron un espectáculo lleno de energía, tradición y sentimiento.
Desde temprano, miles de fanáticos comenzaron a llenar el recinto, ondeando banderas y luciendo sombreros al ritmo del regional. El ambiente fue una verdadera fiesta mexicana, con un público entregado y una producción impecable que combinó luces, sonido y escenografía inspirada en los colores patrios.
El dueto coahuilense Los Dos Carnales se llevó una de las ovaciones más grandes de la noche al invitar al escenario al cantautor Joss Favela, con quien interpretaron varios temas en una colaboración inesperada pero muy aplaudida. Entre risas y aplausos, los artistas demostraron la unión y camaradería que existe dentro del género, dejando uno de los momentos más cálidos del concierto. El público coreó con fuerza su éxito El Envidioso, que se ha convertido en uno de los himnos más reconocidos del grupo.
Por su parte, El Fantasma puso la piel chinita a todo el público al aparecer acompañado de un mariachi en vivo. Con interpretaciones llenas de pasión y orgullo, ofreció un recorrido por sus éxitos más representativos como El Circo, Cabrón y Vago, Palabra de Hombre y Soy Buen Amigo, además de algunos temas rancheros que hicieron vibrar a todo el recinto al grito de ¡Viva México!
El guerrerense Gerardo Díaz, junto a su Gerarquía, también encendió la Arena con su estilo auténtico y contagioso. El público no dejó de cantar con sus temas más populares, entre ellos Monedas y Billetes y No Quise Decirle, que resonaron con fuerza entre los asistentes.
Al final de la noche, Gerardo Díaz, El Fantasma y Los Dos Carnales regresaron juntos al escenario, agradeciendo al público por su cariño y cerrando el concierto interpretando Mi Última Caravana en conjunto. Con las luces tricolor iluminando el recinto y miles de voces coreando al unísono, la Arena CDMX se convirtió en símbolo de unión, orgullo y amor por la música mexicana.
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